¿Quieres conocer la increíble historia del primer chef de Francia? ‘Carême: chef de reyes’ es la serie francesa de AppleTV+ que te llevará a la época de Napoleón Bonaparte para que seas parte del increíble ascenso de Antonin Carême -desde su origen marginal y humilde hasta la cocina de reyes- y disfrutar de una gran historia de cocina y traiciones, en las pieles de Benjamin Voisin, Jérémie Renier, Lyna Khoudri, Alice Da Luz, entre otros grandes intérpretes.
La temporada de ocho episodios tiene nada más y nada menos que a Martin Bourboulon (saga Les Trois Mousquetaires, Eiffel) en la dirección y a Vanessa van Zuylen y Dominique Farrugia en la producción ejecutiva.
Carême: chef de reyes cuenta la fascinante historia del primer chef del mundo en convertirse en una celebridad, Antonin Carême (Benjamin Voisin), quien partió desde sus humildes orígenes en París hasta alcanzar la cima del estrellato culinario en la Europa napoleónica. Aunque Carême solo sueña con convertirse en el chef más famoso del mundo, su talento y sus ambiciones atraen la atención de poderosos y reputados políticos que lo requieren como espía para Francia. Decidido a escapar de la pobreza y cumplir su sueño, Carême puede elegir la venganza o tener todo lo que tanto ha soñado: mujeres, riqueza, fama. Pero ¿a qué precio? ¿El de su amor, su alma, su vida?
Esta mezcla entre historia y ficción, traición y honor, pasión y legado produce una experiencia de visionado exquisita, que emociona, asombra y conmueve. Un amalgamado perfecto entre cocina francesa, los rezagos de la Revolución Francesa, el período napoleónico y un agudo juego de espías, suspenso, acción y crimen.
Las 5 estrellas de Carême
Conexión con el personaje principal
Es imposible no conectar con Benjamin Voisin (Été 85, L’étranger): este versátil actor, capaz de hacer explotar las pantallas, posee un magnetismo impresionante. La organicidad y la pasión que le imprime a Carême hacen que, solo por él, el espectador no pueda apartarse del visionado. Su personaje de humilde cocinero que quiere ascender y conseguir el lugar en la sociedad de la que fue excluido de alguna manera es maravilloso.
Casting de alto nivel
Pero no solo él consigue lo suyo. Si bien siempre es un tiro al piso contar en cualquier producción con la excelencia de Jérémie Renier y el talento de Lyna Khoudri, ambos actores aquí se lucen especialmente.
El primero, en el papel del misterioso Charles-Maurice de Talleyrand-Périgord, un noble involucrado en un peligroso juego en el que todos son capaces de todo. La segunda, en el de Henriette, una seductora espía que sabe cuándo callar… o traicionar.
Dirección de arte
Más que una serie, la dirección de arte -además del guión y la dirección, claro- consigue dar la sensación de que se esta viendo una película en ocho partes. La calidad de la escenografía, de la ambientación de época es digna del séptimo arte. No en balde, a esta producción se la presentó en Francia como una producción nacional de la más alta envergadura.
La dirección de arte no pinta, sino que traslada al público a la conmocionada Francia de Napoleón, en la que el huérfano Carême, que goza de un talento privilegiado, solo anhela una cosa: convertirse en el chef más célebre del mundo y crear un nuevo arte, el de la gastronomía.
Cada episodio consigue transmitir la miseria de las calles, la dureza de la cocina y la opulencia de la burguesía.
Las locaciones y el vestuario
La serie se rodó en lugares emblemáticos de París: l’Opéra Garnier, le Palais des Tuileries, le Palais-Royal figuran solo entre los principales.
El impactante vestuario es creación del artista multipremiado en los César Pierre-Jean-Laroque.
La historia real de trasfondo
Hay que aclarar de entrada que esta serie francesa se toma varias libertades, pero, el fondo, que no es otro que la lucha de Carême por ascender en la cuisine française, permanece intacto.
Voilà !, aprovechamos para contar un poco sobre la asombrosa historia real de Antonin Carême.
El creador del famoso gorro blanco de los chefs -¡sí, Antonin Carême es quien lo inventó!- nació con el nombre de Marie-Antoine el 7 de junio de 1784 en la rue du Bac de París, en el seno de una familia muy pobre en la que los progenitores apenas alcanzaban a alimentar a 14 hijos.
Un buen día, cuando solo tenía ocho años, el pequeño Marie-Antoine fue abandonado en las calles por su padre.
Mendigando en las calles de París, se apiado de él un tabernero, quien lo contrató para trabajos pesados, primero, y lo pasó a la cocina, después.
Es en los fogones donde Marie-Antoine -quien luego se hará llamar Antonin Carême, para no portar el nombre de la famosa reina- descubre y desarrolla su gran talento cocinero, el que lo llevará a convertirse en el más famoso de los cuisiniers-pâtissiers de la época.
Así, a los 13 años se encontró trabajando en la famosa pastelería Bailly, en la rue Vivienne, que se encargaba de proveer las cocinas de M. de Talleyrand, diplomático y ministro de Napoleón.
Su tiempo libre lo invertía estudiando para su oficio: la Bibliothèque royale fue testigo de las incontables horas que él -que aprendió a leer y escribir por cuenta propia- pasaba alimentando sus conocimientos en gastronomía.
Pronto, sus preparaciones comenzaron a llamar la atención por su originalidad y sus presentaciones, que se salían de lo común en su tiempo, y devino un verdadero artista: « Le roi des chefs, le chef des rois ».
A sus 18 años, en 1802, abrió su propia pastelería en la rue de la Paix, a la vez que continuaba su formación con los más grandes cocineros.
Luego de que Talleyrand lo tomara bajo su protección, comenzó a trabajar en grandes cocinas de palacios, como en la del Château de Valençay.
Pero su fama no lo llevó hasta ahí nada más: también cocinó en París para el emperador de Rusia y en otros países como Inglaterra, donde deleitó a un futuro rey Jorge IV.
Experto culinario, Carême es autor de varias obras. Entre ellas: Le Pâtissier royal parisien (1815), Le Pâtissier pittoresque (1815), Le Maître d’hôtel français (1822), Le Cuisinier parisien (1828), L’art de la cuisine au dix-neuvième siècle (1833) o La Cuisine ordinaire (1848).
Lamentablemente, los vapores tóxicos que salían de los hornos acabaron por tener su efecto en el chef, que enfermó en 1830 para finalmente morir el 12 de enero de 1833, a los 48 años de edad.
Carême es considerado el mayor maestro de la cocina francesa y reconocido por poner en valor los productos de estación, favorecer lo simple y lo artístico, revolucionar la cocina moderna y fundar la cocina burguesa del siglo XIX.
¿Qué podría ser mejor en esta serie?
¡Nada! Esta serie francesa es, sencillamente, perfecta.
Lo único que pedimos es que la renueven para su segunda temporada. Hasta el momento, se sabe, ese es el deseo de la producción, solo falta la luz verde de AppleTV+.
Una fina ficción histórica que nos permite vivir desde dentro dos de los tesoros que hacen tan rica a Francia: su cocina y su impronta política en Europa y el mundo.
¿Cuándo comenzarás a ver ‘Carême: chef de reyes’? Deja tu respuesta en nuestras redes sociales
Coucou Lola ! Pasión por Francia y la cultura francesa
*Con información de Savoirs d’histoire, Gallica, entre otros.
Coucou Lola 