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Tal oferta nos llevó a sumergirnos en los últimos días en un maratón de visionado de varios de sus filmes franceses. Creemos que una buena manera de compartir la experiencia de lo que hemos visto es, mejor que haciendo un review de cada uno, intentando una selección en modo de agrupación por temas (así sea por aproximación).
Hoy les compartimos nuestra reseña de dos producciones galas que giran en torno al amor.
Amor Índigo
L’Écume des jours | Michel Gondry | Francia | 2013 | 94 min
La corta vida del escritor francés Boris Vian (vivió solo 39 años) nos dejó suficiente material para gozar de su talento: poesía, crónicas, novelas.
L’Écume des jours quizás sea su novela más conocida. Alcanzó la notoriedad luego de la muerte del autor y todavía se la estudia en las escuelas francesas.
Mezcla de poesía, absurdo y surrealismo, es un gran paseo, desde el amor, por temas como: la precariedad laboral, la enfermedad, la muerte. Todo, bajo una pintura de jazz.
Y, ¿quién mejor para encargarse de su traspolación al cine que el genio de Michel Gondry?
Con un elenco de lujo que incluye a Audrey Tatou, Romain Duris, Gad Elmaleh, Omar Sy y Charlotte Le Bon, entre otros rostros más que reconocibles del cine francés, esta es una película que merece varios visionados: su estética visual y su narrativa están plenas de grandes referencias culturales y filosóficas.
Luego de que su amada Chloé (Tatou) cae enferma por tragarse una flor que ahora crece en su pulmón, el inventor Colin (Duris) intenta todo por mantenerla con vida. Para ello, saldrá de su mundo habitual (uno soñado y extraordinario) y se internará en el mundo vulgar del proletariado. Lo acompañan en su viaje sus amigos, personajes tan delirantes como él, con los que vivirá mil situaciones absurdas y oníricas.
Gran realización, esta joya del cinéma français quizás tenga como máximo valor haber logrado que su hilo conductor sea -entre tantos símbolos y bellas locuras en las que sería común perderse- fácil de seguir por el espectador; de manera que a la vez que este se deleita con la poesía visual que se le presenta, puede acompañar el camino del héroe. Claro, con todo el humor entre negro y absurdo que ya, de por sí, caracteriza a Gondry.
Es como si el realizador francés hubiese encontrado la máxima oportunidad para, ¡ahora sí!, ser él en su máxima expresión.
Amor mío
Mon roi | Maïwenn | Francia | 2015 | 124 min.
Con un desarrollo de tiempo elíptico que nos hace volver una y otra vez a los antecedentes que llevaron a Tony (una estupenda Emmanuelle Bercot) a su estado actual (en un centro de rehabilitación fisicoterapéutica, debido a un accidente de ski), cada vuelta en el tiempo, lejos de hacer reiterativa la acción, nos ayuda a darle una dimensión real y dramática a su historia: la de su conflictiva relación con Georgio (un intimidante y exasperante Vincent Cassel).
Lo que vemos es una disección de una convivencia tóxica en todos sus sentidos. Una reconstrucción de las progresivas pérdidas de la realidad y hasta del amor propio de esta mujer que, en función de su dependencia afectiva hacia un hombre para nada estable, se va borrando de todo.
Hay que decirlo, la interpretación de Bercot es arrolladora y fácilmente se ubica por encima de todas.
Un guión muy bien escrito, con un gran desarrollo de personajes y de sus vínculos entre ellos, y una dirección aguda logran un filme inquietante y emotivo.
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Coucou Lola 