Una mirada dura y cruda al sistema de selección universitaria en Francia (en este caso, para el ingreso a la facultad de Medicina), a sus inevitables ‘injusticias’ y a lo que podría definir, o no, la vocación de las personas; todo, a partir de una historia de amistad y solidaridad. Esto es lo que nos trae el realizador Thomas Lilti con su Primer año (Première année).
Antoine y Benjamin se conocen durante la preparación para las pruebas de acceso a la carrera de Medicina. Será el tercer intento para Antoine (que no desea nada más en el mundo que poder estudiar Medicina, que poder hacerse médico) y el primero para Benjamin (que hará el intento más que por/para él, por/para satisfacer los deseos de su familia; sobre todo los de su padre, un gran cirujano). En un sistema educativo francés colapsado, alcanzar los primeros lugares disponibles para seguir la carrera médica (poco más de 200 para una población de al menos 2 mil aspirantes) representa más que una prueba, casi la vida.
Parte importante del gancho de esta historia radica en un elemento claramente diseñado: el juego de los opuestos. Antoine es el chico que está dispuesto a sacrificar todo por alcanzar su objetivo; Benjamin es el que mucho no entiende qué hace ahí y si todo aquello es de verdad lo que desea. Las interpretaciones de estos personajes principales, encarnados por Vincent Lacoste y William Lebhil, se merecen más que aplausos: dignas, cercanas, orgánicas y conmovedoras. Su vínculo se hace tan real y convincente que el espectador no puede sino estar de parte de ambos y recorrer todo el camino junto con ellos viviendo a pleno cada una de sus angustias.
Este es un filme sobre el autodescubrimiento, la amistad, la esperanza, el sacrificio, el esfuerzo y los sinsabores de las apuestas de vida al todo o nada. Un drama con toques de comedia en un ritmo trepidante que por momentos roba por completo el aliento.
Vale la pena destacar que además de tocar estos tópicos la película un poco esboza -un poco, pero con suficiente agudeza- el papel del padre (psicológicamente hablando) como esa figura a la cual habría que vencer o superar cuando se llega a la vida adulta o para finalmente llegar a ella.
Con esta producción Lilti cierra una trilogía de comedias sociales contemporáneas sobre el mundo de la medicina, que inició con Hippocrate (2014), que fue estrenada en la Semana de la Crítica de Cannes en 2014, y obtuvo siete nominaciones a los premios César de 2015, incluyendo las categorías de Mejor película, Mejor director y Mejor guión, y continuó con Médecin de campagne (2016), que fue un éxito comercial en Francia donde obtuvo una nominación al Mejor actor en los premios César de 2017.
PRIMER AÑO
(Première année)
Thomas Lilti
Francia, 2018
con Vincent Lacoste y William Lebhil
ESTRENO EN MÉXICO VIERNES 30 DE AGOSTO
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